Uno de los supuestos efectos secundarios de la creatina es que causa calambres.

Al ser un suplemento que provoca una retención de líquidos intramuscular, esto a dado pie a pensar que puede producir calambres debido a una descompensación hidroeléctrica.

Incluso hay personas que afirman categóricamente que el consumo de creatina les produce calambres.

¿Es esto cierto? En realidad no. Existe un estudio que demostró que la aparición de calambres no está relacionada con la creatina. Es más, se demostró que la creatina tenía efectos positivos en la prevención de calambres musculares.

Greenwood (2003) mostró el efecto inverso en un grupo de jugadores norteamericanos que entrenaban durante un tiempo cálido. El 47% de los jugadores que no tomaban creatina sufrieron calambres, respecto a “tan sólo” un 27% de los jugadores que tomaron creatina. Este estudio es interesante, pues, contrariamente a lo que ocurre en muchos deportes en los que es posible quitarse ropa cuando hace calor, los futbolistas americanos deben ir siempre muy tapados, lo que acentúa su deshidratación.

En un grupo de pacientes que sufrían trastornos renales, la incidencia de calambres disminuyó un 60% en cuatro semanas gracias a la ingesta de creatina (Chang, 2002).

Por lo tanto, no debemos preocuparnos por este efecto secundario al tomar creatina; los calambres no están asociados a su consumo.

No obstante, remarcamos la importancia de aumentar la cantidad de agua consumida mientras nos suplementos con creatina. De esta forma obtendremos los máximos beneficios de su consumo sin tener problemas relacionados con la deshidratación.

 

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